En el Campus Sausalito de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, decenas de profesionales de las ciencias sociales, la pedagogía y la psicología asistieron el seminario ‘Construyendo el concepto de Educación Inclusiva’ a cargo de la Investigadora Principal del Centro de Investigación para la Educación Inclusiva, Dominique Manghi, y su equipo.
La Dra. Dominique Manghi comenzó el seminario informando a los asistentes sobre el Centro de Investigación Educación Inclusiva y en específico sobre la línea que ella lidera, denominada ‘Prácticas de Aula y Escuela para la Inclusión’.
La investigadora relató que en un principio el enfoque de ‘educación inclusiva’ en Chile se refirió al grupo específico de las personas con discapacidad. Posteriormente, la promulgación de la ‘Ley de Inclusión’ en 2016 amplió su alcance, entendiéndola mucho más allá de la gratuidad y de la no segregación por la apariencia física: como un derecho universal, equitativo y accesible para todos y todas.
En este contexto, esta línea de investigación se interesa en describir los procesos de inclusión basados en lo que los y las estudiantes representan sobre sus experiencias escolares cotidianas. Para lograr este objetivo, este equipo de investigación considera pertinente replantear distintos conceptos entre las comunidades educativas, como el aprendizaje, la exclusión, la normalidad, entre otros.
El equipo de investigación está conformado por las profesoras investigadoras Giselle Melo e Isabel Aranda y el profesor investigador Gerardo Godoy. Los profesionales, todos ex alumnos de la PUCV, expusieron la importancia del ‘contexto’ como aquellas situaciones no visibles en el aprendizaje, y de la ‘exclusión’, vista como el reflejo de un discurso dominante de indiferencia colectiva. También, explicaron cómo el lenguaje construye la ‘normalidad’, siendo ésta el parámetro para incluir y excluir.
Finalmente, la Dra. Manghi invitó a los presentes a dialogar y repensar en torno a la educación inclusiva, para que avance desde el enfoque en los estudiantes con discapacidades y diagnósticos, hacia un diálogo en la comunidad educativa que supere la indiferencia colectiva, y se preocupe de cualquier estudiante que viva prácticas educativas que lo excluyan.
